25/9/15

Queremos desearles un feliz y saludable curso 2015-2016. Les animamos a todos en el trabajo pastoral con los enfermos. Que sepamos estar a la escucha y acompañar verdaderamente a las personas.  Que llevemos “Salud” allí donde vamos.

PROGRAMACIÓN PASTORAL DE LA SALUD CURSO 2015-2016

"María, icono de la Confianza y el Acompañamiento
“Haced lo que Él os diga”



OCTUBRE 2015: Jueves  8. PRIMER ENCUENTRO DE FORMACIÓN.
TEMA: “Aprendiendo a Acompañar”. Taller de escucha activa.
Ponentes: Elena Rodríguez-Fernando Afonso
         LUGAR: Casa de la Iglesia
         HORARIO: de 17.30 a 19:30

DICIEMBRE 2015: Jueves 17. SEGUNDO ENCUENTRO DE FORMACIÓN
TEMA: “Aprendiendo a Acompañar II”. Taller de escucha activa
           Ponentes: Elena Rodríguez-Fernando Afonso
         LUGAR: Casa de la Iglesia
         HORARIO: de 17:30 a 19:30

FEBRERO 2016: Martes, 9.
PRESENTACIÓN DE LA CAMPAÑA y CELEBRACIÓN-ENVIO: “María, Icono de Confianza y Acompañamiento. Haced lo que Él os diga”.
         LUGAR: Casa de la Iglesia
         HORARIO: de 17:30 a 19:30

MARZO 2016: 29, 30 Y 31. Jornadas anuales de Formación de P.S.  
      Ponente Mariola López Villanueva
HORARIO: 16:00 a 20 h
LUGAR: Por determinar

JUNIO 2016: Jueves, 9
TEMA: Aprendiendo a Acompañar III”.       Cierre del curso
Ponentes: Elena Rguez-Fernando Afonso
LUGAR: Casa de la Iglesia
         HORARIO: de 17:30 a 19:30            

3/5/15

PASCUA DEL ENFERMO 2015




"SALUD Y SABIDURÍA DEL CORAZÓN: 
Otra mirada es posible con un corazón nuevo"


Vamos finalizando el recorrido de la Campaña del enfermo de este año 2015 que comenzamos el 11 de Febrero y culmina el 6º domingo de Pascua con "·La Pascua del Enfermo".  Nuestro objetivo en este tiempo es siempre intensificar el cuidado y la atención de los enfermos.  Profundizar nuestra reflexión y nuestra conciencia, acompañados por el lema y el tema que se nos brinde. Ahondar en la consciencia de que nuestra valía y nuestro valor no están en la salud meramente física, abarca mucho más, aunque la salud físico-psíquica es un valor importante. Apuntamos a la Salud global, integral, la Salud completa de la que nos habla el Evangelio. La Salud que implica nuestro Ser entero y verdadero. Hacer este recorrido es vivir en una dinámica de conversión personal y comunitaria.  Supone cambiar el chip y rescatar las otras dimensiones que contiene la Salud: la emocional, la relacional, la laboral, la comunitaria, la espiritual... Supone también devolver el lugar en medio de nosotros a los enfermos, no sólo como sujetos de cuidado sino como dadores de cuidados ellos también. Sí, desde la enfermedad podemos cuidar a los otros, con nuestra oración, nuestra apertura y aceptación, aportamos el valor de nuestra experiencia y del amor con el que estemos viviendo nuestra vida..., y este "valor" es real e incalculable, y es la mejor aportación que podemos hacernos unos a otros, nuestro amor.

Recordamos a toda la comunidad diocesana la obligación de cuidado -no de norma sino de amor verdadero- que tenemos con, desde  y para los enfermos. Y animamos a hacer hueco en nuestras celebraciones y actividades parroquiales, de centros de mayores, de hospitales, etc. para ellos. Celebremos la Pascua del Enfermo.

En la parte superior del blog, haciendo un clic en la pestaña donde pone "liturgias de la Pascua del Enfermo" podrán encontrar la liturgia de este año.
En la pestaña "mensaje de los obispos" y en la de "mensaje papal" podrán encontrar los mensajes de 2015.

24/4/15

JORNADAS DE PASTORAL DE LA SALUD EN GRAN CANARIA



Los días 14, 15 y 16 de abril de 2015, en los salones de la parroquia de S. Vicente de Paúl, celebramos las Jornada de formación de Pastoral de la Salud. Con el lema “Otra mirada es posible desde el Evangelio”, ahondamos en la espiritualidad cristiana siguiendo la carta del Papa Francisco “La alegría del Evangelio” y el “itinerario espiritual”, de Sta. Teresa.  En esta reflexión nos acompañaron Felipe Bermúdez, Segundo Díaz y Toña Monzón.
Es fundamental, para cualquier cristiano, “volver a Jesús”.  Es una necesidad vital el encuentro personal con Jesús, para no estar simplemente “haciendo número”. Junto a este encuentro personal, la necesidad de crear comunidades dentro de las parroquias, pequeños grupos de vida que caminen juntos, escuchen la Palabra, compartan la vida y la celebren, crezcan como personas adultas y en la fe. Con un horizonte: salir a la vida como lo hizo Jesús, desde otra visión de las cosas y las personas, con otros valores, los del Evangelio, e implicarnos en la vida y en el mundo que nos ha tocado vivir. La realidad de nuestro mundo es compleja y no valen soluciones simples. Vivimos en un mundo donde se dan situaciones de mucha dureza, de intenso dolor; un mundo donde el ritmo está marcado por los poderosos, fundamentalmente los sistemas financieros, que generan una gran injusticia y desigualdad. Van dejando fuera de su órbita a un gran número de personas que va despojando y arrimando en el camino; son  rostros concretos, tienen nombre y apellidos, son hermanos. Los cristianos debemos movernos desde otras coordenadas: las de Jesús. El hizo opción preferencial por los marginados y sacados del sistema imperante en su tiempo.
Para este encuentro personal con Jesús, necesitamos del silencio,  aprender a estar en el silencio y morar en él, para escuchar, conocernos, discernir, tomar contacto con lo profundo, con lo que realmente somos, para experimentar que “soy amado profunda e incondicionalmente por El”, para aprender a amar como El…  Y tal como Jesús hizo en su vida, ir estableciendo esa dinámica continua entre interioridad y alteridad, que no son realidades paralelas ni opuestas: encuentro con Dios, encuentro conmigo en Dios, salida a los demás desde Dios, transformando la realidad que nos circunda desde El. Sólo siendo transformados primero nosotros, podremos transformar algo, si no, estaremos simplemente entretenidos, engrosando una fila de dormidos que creen que están en un sitio en el que no están y que son algo que no son.
¡Despertar! hay que despertar, aprender a vivir despertando cada día, atentos, como lo estuvo Teresa de Ávila.  El momento de ese despertar no tiene edad, ni condición social ni de género, es un Don pero es también nuestra principal tarea en la vida. Despertar para llegar a saber quiénes somos y desde ahí vivir de “otra manera”.  En ese recorrido vital, Teresa nos advierte de las trampas y enredos en los que nos podemos meter y de hecho caemos.  A modo de estancias, como las de un castillo, nos fue mostrando las etapas por las que atraviesan la psique y el espíritu humanos y cuáles son las luces y las sombras que cada una de esas etapas contienen.
Compartimos y vivimos en un clima familiar y distendido y terminamos cada día con una “danza contemplativa”: orar con el movimiento lento y repetido, con gestos que operan una disposición en nuestro corazón y nuestro espíritu en la oración, nos permitió recoger lo escuchado, cerrar nuestra jornada del día con paz y confianza.









5/4/15

JORNADAS DE FORMACIÓN 2015


14, 15 y 16 de ABRIL   2015
(de 16:00 a 20:00h)

SALUD Y SABIDURÍA DEL CORAZÓN:

desde la mirada del Evangelio.





Fundamentación: En el día a día de nuestra vida y nuestro compromiso pastoral, experimentamos fortalezas y desánimos, entusiasmo y falta de motivación, luces y sombras presentes en nosotros.
  
Hay una alegría profunda que nace de la vivencia de Dios, de la toma de consciencia de nosotros mismos, de la comprensión y la aceptación amorosa que de Él nos llega.
La acogida y vivencia del Evangelio y de los valores contenidos en él, nos ayudan a realizar este recorrido, crecer y desplegarnos humanamente y como creyentes. Necesitamos, de vez en cuando, parar y tomarnos el pulso ¿ cuál es la vivencia real que tenemos del Evangelio? 
El Papa Francisco, en su exhortación Evangelii Gaudium, nos habla de estas dificultades por las que atravesamos, de sus causas y las actitudes a revisar. También, de la Alegría que brota en quien se arriesga a seguir el camino del Evangelio.
Presentamos a una mujer, Teresa de Jesús, estamos en el 5º Centenario de su nacimiento. Teresa nos transmite su itinerario vital.  Quizá estamos demasiado acostumbrados a contemplarla y admirarla en sus virtudes y andaduras, y perdemos de vista que “su itinerario”, es un mapa que nos orienta en el recorrido espiritual que supuestamente hemos emprendido.


Ponentes:
  • D. Felipe Bermúdez: “Hacia una Iglesia portadora de salud” 
  • D. Segundo Díaz: Los dos ejes de la espiritualidad evangélica: la interioridad y la alteridad
  • Dña. Toña Monzón: “Teresa de Jesús: una mirada desde el interior”   Desde el camino de Teresa, pinceladas para la vida”



Objetivos:
  • Profundizar en la espiritualidad del Evangelio
  • Conectar esta espiritualidad con nuestra vida y nuestra acción pastoral y profesional.
  • Convivir y compartir nuestra experiencia
Metodología: Participativa

  • Charlas
  • Trabajo de grupos
  • Espacios de oración

LUGAR:
PARROQUIA DE SAN VICENTE DE PAUL  (EN EL LOMO APOLINARIO)
TFNO DE CONTACTO: 928319924

28/1/15

CAMPAÑA DEL ENFERMO 2015


CAMPAÑA DEL ENFERMO 2015
SALUD Y SABIDURÍA DEL CORAZÓN: Otra mirada es posible con un corazón nuevo”

Comienza una nueva Campaña del Enfermo que este año nos invita a buscar la Sabiduría y cambiar la mirada. En nuestro día a día, en nuestras tareas y desvelos, en nuestros ánimos y desánimos internos, en nuestros encuentros y desencuentros… vivir desde lo profundo y “mirar” desde el corazón, es posible.  Esta actitud nos ayuda a estar en mayor armonía con nosotros mismos y las circunstancias que se nos den: aceptación y acogida de aquello que nos toca vivir y de las personas que están en nuestras vidas.

Vivir con los mismos sentimientos y actitudes del Señor” nos dice Pablo, ésta frase aparentemente sencilla es todo un proceso y un camino en nuestra vida.  La posibilidad de abrirnos y renovar  el corazón, es tarea, es Don, y es el mejor regalo que podemos hacernos unos a otros.

Con ese deseo para cada uno, les invitamos a acoger y difundir la campaña.  Que los enfermos estén en el centro de nuestro corazón y nuestra mirada.
A continuación les ponemos las Orientaciones del Departamento nacional y la liturgia Un saludo ¡Feliz Campaña!

NOS REUNIREMOS EN LA CASA DE LA IGLESIA EL LUNES 9 A LAS 17:30 PARA PRESENTACIÓN DEL MATERIAL Y CELEBRACIÓN ANUAL DEL INICIO DE CAMPAÑA


ORIENTACIONES
Como en años anteriores, un mismo tema nos une para realizar la Campaña del Enfermo desde la Jornada Mundial, 11 de febrero, hasta la Pascua el 10 de mayo, VI domingo de Pascua: “Salud y sabiduría del corazón”.
Cuando el Consejo Pontificio nos propone este tema pretende hacernos descubrir que en este tiempo nuestro, en el que sólo cuenta lo que ‘reluce’ y lo efímero, la sabiduría del corazón consiste en la recuperación de la mirada hacia el hombre doliente con actitud contemplativa.
De ello se sigue, además, la toma y re-visionado del sentido del sufrimiento y de la oración según la Sabiduría de Dios. Y nos llama a revisar nuestra mirada y nuestras motivaciones-actitudes de los agentes de pastoral a la luz del corazón compasivo de Cristo.
Ofrecemos estas sencillas “ORIENTACIONES” como material que puede ayudar a una necesaria preparación y celebración en los diferentes ámbitos –nacional, interdiocesano, diocesano y local– a las Delegaciones Diocesanas y, por ello, a cuantos deseen colaborar activamente para lograr que la Campaña sea una realidad pastoral fecunda en nuestra Iglesia.

Madrid, octubre de 2014
RAzones PARA ELEGIR el tema y ENFOQUE DE LA CAMPAÑA

Al tema central de la Campaña de este año “Salud y sabiduría del corazón” el equipo nacional hemos pensado añadirle un lema “Otra mirada es posible con un corazón nuevo”, que de alguna manera recoge la concreción del mismo. La mirada de Dios y su Hijo sobre el enfermo y quien sufre, es una mirada distinta a la de la sociedad en general. Mirada que nace de un corazón nuevo y proyecta a un cambio de actitudes que transformen también nuestro corazón desde esa sabiduría del Padre. A continuación indicamos las razones del tema y el posible enfoque:
1.      El sentido de Iglesia y vivencia de comunión uniéndonos a la propuesta del Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud al ofrecer como tema para la Jornada Mundial del Enfermo 2015: Salud y sabiduría del corazón, con el lema: “Yo era ojos para el ciego, yo fui pies para los cojos”.
2.      En continuidad con la Evangelii Gaudium. En este momento de la Iglesia en que el Papa Francisco nos invita a volver a Jesús, necesitamos recuperar sus mismas actitudes. La Exhortación nos invita a hacer una reflexión sobre nuestras tentaciones como evangelizadores, y a anunciar el Evangelio con nuevas actitudes y lenguajes. Llamada a abrir nuestros ojos para descubrir donde están hoy los enfermos, cómo están siendo acompañados y visibilizados en nuestra sociedad e Iglesia, y transformar el corazón de las mismas para que los pongamos al centro de nuestras preocupaciones y atenciones, como hizo Jesús.
3.      Porque hoy los enfermos y ancianos continúan estando poco visibilizados en nuestra sociedad. El mismo Papa Francisco ha alertado en varias ocasiones sobre el ‘descarte’ de enfermos y ancianos.
4.      Somos invitados a dejarnos llenar y llevar por la sabiduría de Dios: “La amé y la busqué desde mi juventud y la pretendí como esposa. Así pues, decidí hacerla compañera de mi vida, sabiendo que sería mi consejera en la dicha y mi consuelo en las preocupaciones y la tristeza. Pero, al comprender que no la alcanzaría, si Dios no me la daba, acudí al Señor y le supliqué, diciéndole de todo corazón: «Dios de los padres y Señor de la misericordia, dame la sabiduría» (Sab. 8,2.9.21; 9,1.4). Conscientes de que si nosotros no la tenemos no podemos transmitirla.
5.      Tenemos necesidad de abrir nuestra mirada también a la sabiduría que nace de Dios hacia quien sufre. Sabiduría pastoral mostrada y reflexionada en la Campaña 2013 bajo el icono del Buen Samaritano: al enfermo lo ve, se para, se inclina hacia él, se hace cargo de su necesidad y su problema, carga con él, y encarga a otros la tarea de continuar su cuidado.
6.      Llamados a vivir el compromiso social. «Desde el corazón del Evangelio reconocemos la íntima conexión que existe entre evangelización y promoción humana, que necesariamente debe expresarse y desarrollarse en toda acción evangelizadora. La aceptación del primer anuncio, que invita a dejarse amar por Dios y a amarlo con el amor que Él mismo nos comunica, provoca en la vida de la persona y en sus acciones una primera y fundamental reacción: desear, buscar y cuidar el bien de los demás» (E.G.178). Por tanto, el creyente y toda comunidad cristiana no pueden escapar a esta llamada: comprometerse activamente en el cuidado integral, promoción y defensa del enfermo y de la salud.
7.      Cada Campaña del Enfermo es, o ha de ser, una nueva oportunidad evangelizadora. Evangelización marcada por la Alegría: «La persona que viva en profundidad la alegría del Evangelio adquiere mayor sensibilidad ante las necesidades de los demás» (E.G.9). «El mundo de la salud y de la enfermedad es hoy, igual que ayer, lugar privilegiado para la nueva Evangelización: Jesús anuncia el Evangelio del Reino curando, y confía a sus discípulos la misión de curar» (Mt 10,1) (Congreso Iglesia y Salud).
8.      El cartel de la Campaña 2015 trata de mostrar estas ideas. Partiendo de saber que va a estar presente en hospitales, residencias y otros lugares de evangelización misionera, hemos querido resaltar en él: un niño-joven portando un corazón nuevo, la fragilidad de las personas que llevamos en nuestras manos, la prioridad de la atención a los más frágiles. Estamos llamados a mirar de una forma nueva a las personas –al estilo de Jesús- y cuidarles desde las claves de la sabiduría divina.
9.      Es también el Año de la Vida religiosa. En él deseamos contemplar, aprender y enriquecernos con el testimonio de tantos consagrados; agradecer la inmensa labor que han hecho con los enfermos, también de las vidas entregadas en este servicio. Y animar y fortalecer la ilusión de nuestras comunidades religiosas para que sigan siendo motor de atención y respuesta esperanzada a tantos retos que se nos plantean cada día en el mundo de la salud.
10.  Celebramos, además, los 50 años de la Conclusión del Concilio Vaticano II (1965). Es una llamada a retomar sus líneas pastorales básicas: Iglesia como Pueblo de Dios (LG), que escuche y acompañe los sufrimientos y los gozos de la gente (GS); el valor central de la Palabra de Dios en la vida del enfermo y de los agentes pastorales (DV); profundizar en la Liturgia (SC) especialmente en los sacramentos propios de la enfermedad; una llamada a la Misión ‘ad gentes’ (AG), a salir al encuentro de las gentes más necesitadas; y el papel fundamental del laicado en toda ella (AA).
11.  El Papa nos recordará en su Mensaje que la Sabiduría del corazón es servir al hermano, es estar con él, es salir de sí hacia el hermano y ser solidarios con él sin juzgarlo.
12.  La familia. ¡Qué gran papel el suyo! y ¡qué difícil a veces! Debemos reconocer y valorar siempre su entrega, su testimonio, pero también cuidarles pues muchas veces necesitan apoyo, cercanía, escucha y ayuda para vivir de manera más sana, humana y cristiana la enfermedad de su ser querido. Ellos son el rostro diario de la caridad junto al enfermo, pero necesitan también sentirse amados por Dios y por la comunidad de fe.
13.  Los Religiosos y Religiosas. En este año de la Vida Consagrada retomamos la llamada que se nos hace desde la Iglesia: “Cuidar a los enfermos en nombre de la Iglesia, como testigos de la compasión y ternura del Señor, es el carisma propio de las comunidades religiosas” (RUPE, 57). Resaltar su testimonio de entrega, incluso a veces con la donación de la propia vida, es también un deber en nuestras comunidades en esta Campaña. Así como revitalizar la presencia de los religiosos en el servicio a los enfermos, no sólo en los centros propios, sino en las comunidades parroquiales y en las casas.
14.  Los Profesionales Sanitarios y los Voluntarios. Estas experiencias se extienden a todos los que ejercen de manera desinteresada el propio servicio al prójimo que sufre. (Salvifici Doloris, 29). Vosotros sois «reservas de amor», que lleváis serenidad y esperanza a los que sufren. También vuestro testimonio de amor es signo de otra mirada distinta que lleva en su interior corazones nuevos y renovados por el Espíritu.
15.  Los Obispos y Sacerdotes. «Aunque se deben a todos, de modo particular, sin embargo, se les encomiendan los pobres y los más débiles... tengan la mayor solicitud por los enfermos y moribundos, visitándolos y confortándolos en el Señor» (PO, 6). En una cultura de la indiferencia, “tengan el valor de ir contracorriente (…) contemplando, adorando y abrazando a Cristo en el encuentro cotidiano con él en la eucaristía y en las personas más necesitadas”. (Papa Francisco en la Misa con los obispos, sacerdotes, religiosos y seminaristas. JMJ 2013).
16.  Las comunidades. Requiere en todos los cristianos una conversión de mente, corazón y obras para conformarse a la sabiduría de Dios. Porque la atención a los enfermos no es “monopolio de nadie, sino deber y responsabilidad de todos” (Evangelium Vitae, 90).

OBJETIVOS DE LA CAMPAÑA
1.      Sensibilizar a los creyentes sobre la necesidad de contemplar a los que sufren y a la sanidad con ojos nuevos. Y a la sociedad entera sobre la necesidad de romper con la cultura de la indiferencia ante el sufrimiento y los que sufren hoy; de descubrir su situación y sus causas, y comprometernos activamente.
2.      Iluminar, revisar y purificar nuestras actitudes y comportamientos con los enfermos y los que sufren a la luz de Jesús y de su Corazón misericordioso hacia ellos.
3.      Mostrar la labor evangelizadora, entre los enfermos, de las Comunidades religiosas y de tantos consagrados.
4.      Promover el compromiso de la comunidad cristiana y de la sociedad con los que sufren, que se traduzca en acciones realistas y creativas, individuales y colectivas, de atención a los mismos.
5.      Celebrar la fe junto a enfermos, familias, profesionales, instituciones, voluntariado, etc., y difundir, apoyar y agradecer su tarea y entrega.

Destinatarios de la Campaña

·         Los enfermos y sus familias.
·         Los Profesionales de la Salud.
·         Los servicios de asistencia religiosa de los hospitales.
·         Las instituciones sanitarias y sociosanitarias, especialmente las de la Iglesia.
·         La jerarquía de la Iglesia, los Organismos de promoción y decisión pastoral y las Instituciones docentes de la Iglesia en el campo de la Pastoral.
·         Las comunidades cristianas y equipos de pastoral de la salud.
·         Las congregaciones religiosas: educación, sanidad y vida contemplativa.
·         La sociedad en general.


Nota importante. La Campaña del Enfermo en la Iglesia española comprende la celebración de la Jornada Mundial del Enfermo (11 de febrero) y la celebración de la Pascua del Enfermo el VI domingo de Pascua (10 de mayo).





CONFERENCIA EPISCOPAL ESPAÑOLA
COMISIÓN EPISCOPAL DE PASTORAL
DEPARTAMENTO DE PASTORAL DE LA SALUD





LITURGIA:


·      La Jornada Mundial del Enfermo es el inicio de un itinerario que culmina en la Pascua del Enfermo, el VI Domingo de Pascua.
·      La Campaña se centra en la recuperación de una mirada contemplativa hacia la persona doliente bajo el lema “una mirada distinta con un corazón nuevo”, invitación que nos hace el Papa a través del Pontificio Consejo para la Pastoral de la Salud.
·      La importancia de los símbolos en las celebraciones: el tema propuesto nos llama a resaltar varios posibles signos (también presentes en la Palabra): la mirada de Dios y de Cristo, como lugar donde arranca el encuentro con él y la acción evangelizadora; el corazón de Jesús, como espiritualidad de la compasión de Dios hacia el que sufre; o la imagen de algún consagrado/a vocacionalmente servidor de los enfermos; haciéndolos presentes en los momentos litúrgicos o celebraciones principales: la Jornada Mundial y la Pascua del Enfermo.
·      También se puede y debe usar:
·      Cartel de la Campaña.
·      Subsidios litúrgicos.



 


11 de febrero (Ntra. Señora de Lourdes): “Jornada Mundial del Enfermo” (pontificia y dependiente de la CEE, obligatoria). Liturgia del día (véase secc. MISAL), alusión en la monición de entrada y en la homilía; intención en la Oración Universal.
MISAL: para la feria cualquier formulario permitido (véase pág. 67, n. 5) / para la memoria 1.ª Oración propia, y el resto del común o de un domingo del T.O. Por “utilidad pastoral”, a juicio del rector de la Iglesia o del sacerdote celebrante, se puede celebrar con el formulario «Por los Enfermos» (cf. OGMR 376), Pf. Común o de la memoria.




Monición de entrada:
En esta memoria litúrgica de Ntra. Sra. de Lourdes, la Iglesia universal nos invita a celebrar la Jornada Mundial del Enfermo. Una celebración que, en España da inicio a la Campaña que discurrirá hasta la Pascua del enfermo el VI domingo de Pascua.
            El tema de este año es “Salud y sabiduría del corazón”, que remite a la recuperación de la mirada hacia la persona que sufre y la necesidad del compromiso de la fe viviendo las actitudes compasivas del corazón del Padre y del mismo Cristo con los enfermos.
            También María fue esa mujer que guardaba todo en su corazón. Corazón maternal que sufrió por su Hijo, y vivió personalmente la pasión de Dios por todos los que sufrían. Que ella nos impulse a ver quién nos necesita y a comprometernos también nosotros en el mundo del sufrimiento, y así dar testimonio de nuestra fe, con el corazón lleno de la sabiduría del Padre.

Oración de los Fieles:
Elevemos nuestra oración a Dios, fuente de sabiduría, que revela sus misterios a los pobres y sencillos. Lo hacemos por mediación de María, salud de los enfermos, respondiendo:
R. Danos, Señor, la sabiduría del corazón.
    Por la Iglesia: para que todas las personas puedan experimentar en ella la fuerza del corazón misericordioso del Padre. Oremos.
    Por nuestro mundo, marcado por el sufrimiento en sus distintas formas, para que Tú, Padre, lo transformes y pongas en su corazón la sabiduría y el Amor de tu Hijo Jesús. Oremos.
    Por nuestros hermanos enfermos: para que, experimentando el misterio de la cruz, sientan también la presencia cercana y maternal de la Virgen. Oremos.
    Por las familias de los enfermos, los profesionales, los voluntarios, y todos aquellos que les atienden y cuidan, tantas veces preciosos iconos de la caridad al lado del que sufre. Oremos.
    Por todos los religiosos y religiosas consagrados al servicio de los enfermos y pobres: para que, como María en su visita a Isabel, sean imagen de la solicitud de Cristo por los hermanos que nos necesiten. Oremos.
    Por nuestra comunidad cristiana: para que tenga siempre unos ojos atentos y un corazón sensible a las necesidades de quien sufre, y se convierta en encarnación de tu Corazón misericordioso. Oremos.
Escucha, Padre, nuestra oración y danos un corazón compasivo como el corazón de María, para que nos mostremos siempre más atentos a las necesidades de nuestros hermanos que sufren. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.
Sugerencias para los cantos:
Entrada: Iglesia peregrina (CLN-408); María es esa mujer (1 CLN-319); Alrededor de tu mesa (1CLN-A4); Dios nos convoca (disco “16 Cantos para la Misa”); Cristo nos une en torno al altar (disco “15 Cantos para la Cena del Señor”);
Salmo responsorial: Goce el Señor con sus obras (Sal 103)
Ofrendas: Te presentamos el vino y el pan (l CLN-H 3); Este pan y vino (l CLN-H 4); Quiero estar, Señor, en tu presencia (disco “Cantos para participar y vivir la Misa”). Si se hace procesión de ofrendas se puede poner música de fondo y se favorece con ello un espacio de “silencio” e interiorización, se da lectura al significado de las ofrendas.
Comunión: Donde hay Caridad y amor (CLN-O 26); Comiendo del mismo pan (2 CLN-O 27); Fiesta del Banquete (l CLN-O 23); Danos un corazón grande para amar. (CLN-O).
Final: Gracias, Señor (l CLN-604); Samaritano de amor (de A. Fernández de León del disco “Quédate, Señor” de P. Núñez Goenaga); Ave de Lourdes; Un canto de envío.

Sugerencias para la Homilía
1.      Las lecturas del día
1R. 8,22-23.27-30: Sobre este templo quisiste que residiera tu nombre. Escucha la súplica de tu pueblo, Israel. El libro de los Reyes nos muestra un momento de petición de Salomón para que el Señor escuche su voz, su necesidad de ayuda y de perdón. El autor inspirado ha recogido el sentido de la fe de un pueblo que, impresionado por la grandeza del Padre y viviendo su propia pequeñez, eleva su voz al cielo y clama “escúchame, Señor, escúchanos”.
Grito fundante de la historia de salvación en Egipto (“he oído sus quejas, conozco sus sufrimientos” –Ex. 3,7) que inaugura un amor que ya no terminará jamás, y que se encarnará en Jesucristo. Al que el pueblo debe responder caminando de todo corazón en su presencia.
Es como un estribillo que repetían también los enfermos con Jesús (“ten compasión de nosotros” –Mt.9,27), y es también la oración constante de todo el que pasa por momentos de sufrimiento.
Sal 83,3-5.10-11 ¡Que deseables son tus moradas, Señor de los ejércitos!. El salmo nos invita a compartir los sentimientos del salmista al entrar en las moradas del Señor, porque Dios se fija en su rostro y lo acoje en su casa.
Podemos sentir en ello, también, una llamada a la Iglesia para que se convierta en un hogar de Dios donde todos deseen estar, especialmente aquellos que sufren o están enfermos. Que se convierta en un remanso de paz, donde descansar del duro camino; que todos “anhelen” esa casa, ese hogar de Dios. Desde el que se pueda también cantar con el salmista: “mi corazón salta de alegría por el Dios vivo”.
Mc 7,1-13 Dejáis a un lado el mandamiento de Dios para aferraros a la tradición de los hombres. El evangelio de hoy es una llamada de atención a nuestras incoherencias, especialmente cuando no somos conscientes de que a veces permanecemos anclados en las tradiciones sin ver a las personas. Quiere que nuestra mirada no vea las formas, las apariencias, sino el corazón, y con la misma, se exprese en un compromiso de Amor hacia el hermano que sufre.
A veces nos falta la mirada de Jesús, para ver al otro con misericordia y cariño, y no con juicio. Jesús, con su manera de ver y acercarse a cada persona que sufre, muestra la gratuidad de Dios, su amor infinito por todos. Y lo hace curando y perdonando.
Así debe ser nuestra misión evangelizadora: una tarea que abra los ojos a la realidad del que sufre y le acerque al contacto directo con una persona, Jesús, que se le hace presente y le empuja también a ella a vivir ese amor en su vida y desde su situación concreta, enfermo o sano, familiar o profesional, voluntario o consagrado.
Otra manera de descubrir el amor de Dios es a través del testimonio de tantos hermanos y hermanas nuestros que viven la enfermedad y el sufrimiento desde su fe y se convierten –muchas veces- en verdaderos iconos del amor redentor de Jesús, con una actitud semejante a la de Él en la Cruz. Ellos son hoy sacramentos vivientes de la presencia de Jesús en medio de nosotros.
Un cristiano que quiere seguir a su maestro no puede desligar su fe de su compromiso por el hermano concreto, por la justicia social en el mundo de la salud y por los que están viviendo a su lado, familia y profesionales.

2. Del  Mensaje para la Jornada Mundial del Enfermo, 11 febrero 2015

·         La sabiduría es es una actitud infundida por el Espíritu Santo en la mente y en el corazón de quien sabe abrirse al sufrimiento de los hermanos y reconoce en ellos la imagen de Dios.
·         Sabiduría del corazón es servir al hermano. Cuántos cristianos dan testimonio también hoy, no con las palabras, sino con su vida radicada en una fe genuina, y son «ojos del ciego» y «del cojo los pies». Personas que están junto a los enfermos  que tienen necesidad de una asistencia continuada, de una ayuda para lavarse, para vestirse, para alimentarse. Este servicio, especialmente cuando se prolonga en el tiempo, se puede volver fatigoso y pesado. Es relativamente fácil servir por algunos días, pero es difícil cuidar de una persona durante meses o incluso durante años, incluso cuando ella ya no es capaz de agradecer. Y, sin embargo, ¡qué gran camino de santificación es éste! En esos momentos se puede contar de modo particular con la cercanía del Señor, y se es también un apoyo especial para la misión de la Iglesia.
·         Sabiduría del corazón es estar con el hermano. El tiempo que se pasa junto al enfermo es un tiempo santo. Es alabanza a Dios, que nos conforma a la imagen de su Hijo, el cual «no ha venido para ser servido, sino para servir y a dar su vida como rescate por muchos» (Mt 20,28).
·         Sabiduría del corazón es salir de sí hacia el hermano. A veces nuestro mundo olvida el valor especial del tiempo empleado junto a la cama del enfermo, porque estamos apremiados por la prisa, por el frenesí del hacer, del producir, y nos olvidamos de la dimensión de la gratuidad, del ocuparse, del hacerse cargo del otro.
·         Sabiduría del corazón es ser solidarios con el hermano sin juzgarlo. La caridad tiene necesidad de tiempo. Tiempo para curar a los enfermos y tiempo para visitarles. Tiempo para estar junto a ellos, como hicieron los amigos de Job: «Luego se sentaron en el suelo junto a él, durante siete días y siete noches. Y ninguno le dijo una palabra, porque veían que el dolor era muy grande» (Jb 2,13). Pero los amigos de Job escondían dentro de sí un juicio negativo sobre él: pensaban que su desventura era el castigo de Dios por una culpa suya. La caridad verdadera, en cambio, es participación que no juzga, que no pretende convertir al otro; es libre de aquella falsa humildad que en el fondo busca la aprobación y se complace del bien hecho.




Oración

Señor, en mi vida me pregunto
muchas veces cómo actuarías Tú.
Te veo junto a los enfermos, cómo les ayudas,
y cómo afrontas Tú el sufrimiento.
¡Cuánto me falta para parecerme a Ti!
Dame tu Espíritu, Señor.
Dame un corazón misericordioso como el tuyo.
Llénalo de esperanza cuando estoy enfermo
o cuando acompaño a quien lo está.
Ilumina mi mirada
para acercarme a los enfermos y sus familias
descubriendo sus necesidades,
pero también sus riquezas y recursos.
Y tú, María, que guardabas
todos los misterios de la vida en el corazón,
haz que yo guarde en el mío las preciosas
–y a veces dolorosas-
experiencias compartidas en medio del dolor,
y las transforme en Vida.



CONFERENCIA EPISCOPAL ESPAÑOLA
COMISIÓN EPISCOPAL DE PASTORAL
DEPARTAMENTO DE PASTORAL DE LA SALUD